No pasarás como las otras que mi espera visitaron, se detuvieron un instante y siguieron su camino, dejando solo como huella memorias de dolor, al usar mi corazón como un punto de partida, sin pensar en que mi amor corre largo y sin mentiras. Mi ayer está lleno de historia, escrita en tantas despedidas que el tiempo adquiere hasta la forma de mis tristezas repetidas; apareciste entre mi sombra cual estrella en firmamento y me has hecho sentir dentro, que se cierran las heridas que causaron mis intentos, por creer en otras vidas. Quédate en mí, te ofrezco un alma en decepciones concebida, que con tu amor has transformado en una casa de alegría; amada quédate conmigo que ésta ves sea diferente, ya no quiero continuar por las sombras amarrado, jamás merece perdón el que nunca ha perdonado. No pasaras he madurado en tu cuerpo y tus sentidos, tu pedernal en mi tiniebla yo vino añejo a ti he ofrecido. Te pido quédate conmigo en esta curva de caminos, ya no me duele el pasado, ni lamento lo perdido, no me importa hacerme viejo si me hago viejo contigo. *No pasarás, por siempre te quedarás conmigo. Te ofrezco un cariño madurado en despedidas y en tristezas concebido. *No pasarás... Tengo un amor que corre largo y sin mentiras, quién le sirve de testigo?. No pasarás... No pasarás, tu no serás como las otras de un amor interrumpido. No pasarás... Mi amor un pedernal en la tiniebla de mi soledad, un vino añejo a ti he ofrecido. No pasarás... No me importa hacerme viejo, si mis años van contigo.
lunes, 1 de noviembre de 2010
"Vino Añejo" de Rubén Blades
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario